Las réplicas, donadas por la empresa local Meycagesal, devolverán a la céntrica calle el aspecto que mantenía a finales del siglo XIX, cuando se instalaron para la canalización y distribución del alumbrado público por gas (hidrógeno carbonado).

En la tarde de ayer, el Ayuntamiento de Puerto Real comenzó en la calle de la Plaza los trabajos para la instalación de las réplicas de los diez arcos de gas que adornaron en su día esta céntrica calle puertorrealeña.

Tal como se anunció a comienzos de este año por parte de Manuel Izco, delegado de Cultura del Consistorio, el Área de Cultura ha venido trabajando en estos últimos meses para recuperar estos emblemáticos elementos del patrimonio local, así, con su recuperación y colocación se da respuesta a una antigua demanda de buena parte de la ciudadanía de Puerto Real, que durante años había venido solicitando volver a recuperar el aspecto que ofrecía esta calle desde fines del siglo XIX hasta hace pocas décadas.

Esta labor de recuperación, según indica Izco, ha sido posible gracias al desinteresado y encomiable trabajo realizado por la empresa puertorrealeña Meycagesal, que de manera totalmente altruista ha confeccionado las réplicas de estos diez arcos. Posteriormente y hasta hace pocas semanas se ha realizado un detenido estudio histórico y técnico para concretar el lugar y manera de ubicación de cada elemento, tratando de ser lo más rigurosos posible con la distribución que los mismos tuvieron en el momento original de ser colocados. En este sentido hay que indicar que los estudios han determinado que los dos que aún se conservan se encuentran desubicados respecto a su lugar original.

Izco recuerda que estos arcos fueron realizados en un taller de la localidad hace más de 120 años, concretamente a comienzos del año 1889, cuando se inició la canalización y distribución del alumbrado público por gas (hidrógeno carbonado). De hecho fueron colocados expresamente para iluminar la calle de la Plaza (por entonces denominada San Roque) durante la celebración de la feria de aquella anualidad con los denominados "globos de cristal", tal como aparece reflejado en la programación de feria de aquel año. Desde entonces y hasta hace algunas décadas han actuado como un singular elemento ornamental y funcional ligado a las más importantes celebraciones de nuestra localidad y por tanto digno de ser recuperado.

Por último, el concejal agradece la generosidad de Meycagesal, sin cuyo desinteresado compromiso con Puerto Real habría sido complicado que este sentimental proyecto fuera tomando forma, y confía que la instalación definitiva de todos los arcos esté completada antes de concluir este año, una vez obtenidos los pertinentes permisos de los ciudadanos afectados por la colocación de estos entrañables elementos.