El teniente de alcalde de Urbanismo da la razón a los vecinos en su preocupación, y solicita a la administración autonómica que obligue al propietario de la salina a que acometa el proyecto hasta el final o lo haga la Junta de manera subsidiaria.

Los vecinos de la barriada rural del Meadero de la Reina continúan temiendo que llueva porque, de la obra de emergencia acordada con la propiedad de la salina Molino de Ocio sólo se ha ejecutado la primera fase. En este sentido, el teniente de alcalde de Urbanismo, Iván Canca, coincide con los vecinos en esta opinión, y lo hace apoyado en los informes técnicos del Ayuntamiento que estiman la necesidad de ejecutar las obras correctamente y completa, a fin de evaluar su efectividad según se recoge en la memoria del proyecto.

Ante el inicio de la época de lluvias, Canca ha solicitado a la Junta de Andalucía, concretamente a la Delegación Territorial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, que inste al propietario a ejecutar la segunda fase: "los vecinos no están para experimentos, no se puede esperar a ver cómo funciona, que es lo que defiende la Junta -expone el concejal-. Si finalmente hay fuertes lluvias y llegan las inundaciones, la responsabilidad será de la Junta por no actuar ahora que estamos a tiempo".

"Además, añade Iván Canca, la actuación debe ser inmediata, ya que, con sólo llover, sería imposible el acceso al caño a través de la marisma o del muro de fuera para continuar con los trabajos. No en vano la actuación está calificada de "proyecto de emergencia".

El teniente de alcalde explica que aunque ésta es una solución de emergencia, incluso funcionando, deberían plantearse otras a medio o largo plazo, pues las inundaciones se producen por el desbordamiento incontrolado del arroyo Guerra con la dificultad añadida de su evacuación en la pleamar.

Pasado el puente del Marquesado, debido a los sedimentos, el arroyo ha perdido el cauce dirigiendo, con lluvias torrenciales, las aguas directamente al Meadero. A esto se añade que el propio Caño Zurraque tiene dificultades para evacuar, motivado igualmente a la colmatación de su propio cauce. Es por ello que habría que recuperar y dirigir tanto el cauce del arroyo de Guerra como del Caño Zurraque a fin de canalizar la escorrentía de las aguas y evitar la periódica entrada en tromba en el hoy Núcleo Urbano del Meadero de la Reina, todo ello con el correspondiente mantenimiento.