Considera "una parcial y distorsionada visión" la que de ella ha mostrado la representante del Partido Andalucista.

Según el regidor local "no se puede demonizar a los habitantes de toda la barriada, en general gente de bien, trabajadora y humilde", haciendo un dibujo de una zona que no coincide rigurosamente con la realidad, "mostrando una barriada deteriorada, degradada, con problemas sociales, económicos y de toda índole", como si fuera un suburbio abandonado por la Administración, de los que hay ejemplos por todo el país, y también en localidades vecinas.

Sin embargo, ha manifestado estar al tanto día a día de los actos vandálicos que se cometen en la barriada por parte de un grupo de desaprensivos, acciones que condena con contundencia, no sólo por las molestias y el peligro que ocasionan a los vecinos, sino también por el enorme gasto que su reparación genera para el Ayuntamiento, esto es, para todos los puertorrealeños.

El alcalde lamenta que este tipo de incidentes eclipsen y solapen la permanente acción municipal en las 512 viviendas, una zona en la que se han realizado intervenciones e inversiones muy importantes y a la que no le falta, gracias a la planificación municipal, ni un centro municipal, ni centros educativos, espacios públicos, jardines, parques infantiles, etc.

Una actuación que parece olvidar el Partido Andalucista, como así también la situación de grave crisis económica en la que nos encontramos, en la que se debe ponderar con mucha cordura y sentido de la responsabilidad en qué se emplea el escaso dinero con que cuenta el Ayuntamiento, pues "debemos actuar para mejorar las 512, pero también el resto de barriadas y otras zonas de Puerto Real, pues todas tienen unas necesidades específicas y no podemos reparar con la agilidad que nos gustaría los destrozos que se producen".

Barroso emplaza al PA a que concrete la fórmula magistral para acabar con los actos vandálicos, un problema urbano al que se enfrentan todas las ciudades de España sin que hasta el momento ningún organismo haya podido atajarlos de manera definitiva, pues está ligado a un conjunto de problemas asociados al fracaso escolar, al desempleo y a la destructuración de la sociedad actual que lo convierten en un fenómeno sociológico de una envergadura que trasciende de cualquier acción municipal específica.

Por eso, concluye, "las palabras del PA responden a la estrategia de criticar por criticar sin poder aportar propuestas viables y concretas a las carencias que se denuncian".