El estudio arroja datos como la emisión en la ciudad de 114 toneladas de CO2 al día o el uso intensivo de la calle Real, y desvela una mala distribución de los aparcamientos.

La media de vehículos privados en Puerto Real es proporcionalmente superior a la media de otras poblaciones de la provincia de Cádiz. Un cambio en los usos y hábitos de los puertorrealeños, más que la puesta en marcha de nuevas infraestructuras, como más aparcamientos o más alternativas viarias, se plantea como la solución a los problemas de movilidad que aquejan a la población.

Así se ha puesto de manifiesto en la presentación del diagnóstico que la Diputación Provincial, en colaboración con el Ayuntamiento de Puerto Real, ha encargado a una empresa especializada en valorar las condiciones de los desplazamientos que los ciudadanos realizan por la localidad, ya sea en transporte público, privado, a pie o en vehículos motorizados. En el acto han estado presentes el alcalde de Puerto Real, José Antonio Barroso, el diputado provincial de Medio Ambiente, Antonio Roldán, el teniente de alcalde de Medio Ambiente, Pedro Romero, y un representante de la empresa Buchanam.

Este estudio tiene como objetivo la elaboración de un plan de movilidad urbana sostenible que corrija las disfunciones registradas, y que ya se viene analizando en la Mesa de Movilidad, que se constituyó en diciembre, y que se reúne periódicamente. El proceso de elaboración de este Plan es público y puede seguirse a través de la web municipal.

Uno de los datos más destacables es que de los 72.500 desplazamientos que Puerto Real registra al día, el 50% de ellos se realiza en vehículo privado propio, mientras que el transporte público sólo se utiliza en un 6%. Asimismo, 28.639 de estos desplazamientos se realiza andando, lo que supone un 39% del total.

Los especialistas han llamado la atención sobre este dato, sobre todo si se tiene en cuenta que el 20% de los desplazamientos tiene una duración de menos de 10 minutos, y el 40% entre 10 y 15 minutos.

El diagnóstico presentado hoy analiza también de manera específica, el uso del transporte público, la comunicación con otras localidades y los motivos de esa comunicación, la valoración de la movilidad ciclista y peatonal, así como las velocidades medias por la que se circula, calibrada en 30-36 km/h de media, lo que origina una siniestralidad entre turismos elevada.

Especialmente conflictiva es la calle Real, que bien por su carácter de vía longitudinal o bien por su histórica condición de carretera nacional, unido a la falta de permeabilidad de las calles adyacentes en algunas zonas (como desde la esquina de Sagasta hacia El Cartabón), soporta más tráfico del deseado, y por tanto es en esta calle en donde se produce el mayor número de altercados de tráfico. En cuanto a los accesos en hora punta, los que registran mayor número de vehículos son las entradas por calle Algeciras y Ciudad de Méjico, con 9.000 vehículos al día, y el puente de Casines, con 11.000 vehículos al día.

Los aparcamientos también han sido objeto de análisis, concluyendo que en Puerto Real, en diferentes zonas, existen aproximadamente 51.000 plazas de aparcamiento, estimándose la demanda en 33.786 plazas. De este modo, el número de plazas por vehículo varía mucho entre las mencionadas zonas, pero la media del índice de plaza por habitante es de 1,35. No obstante, la rotación de estas plazas, esto es, la permanencia de cada vehículo en ellas, supera los 90 minutos, una estancia muy elevada para su optimización.

Este retrato de la movilidad puertorrealeña arroja una cifra de consumo energético y contaminación de 1.080 litros de combustible diario y la emisión de 114 toneladas de CO2 al día.

El alcalde, José Antonio Barroso, ha llamado la atención sobre la necesidad "de incentivar un cambio de hábitos desde la acción política, pues como ahora se comprueba, el problema no es la falta de aparcamientos, sino demasiados coches". Entre las medidas que ya se están llevando a cabo, ha destacado la "remodelación de los trenes de Cercanías, el soterramiento que mejorará la permeabilidad de la ciudad y la construcción de nuevos carriles bici". Asimismo, ha mencionado que "las pautas urbanísticas de baja densidad de población, incluso en el centro histórico, la condición polinuclear del término municipal y un uso extensivo del territorio, frente a un uso intensivo, hacen muy difícil encontrar soluciones definitivas para los transportes y comunicaciones, si bien estamos convencidos de que trabajando lograremos corregir estas contradicciones".

La Diputación Provincial de Cádiz, y en su nombre, Antonio Roldán, se ha comprometido "a continuar trabajando y a apoyar el Plan de Movilidad puertorrealeño para poner en marcha las propuestas y medidas que se valoren y expongan en las distintas mesas, con el fin de ir reduciendo esos datos y crear así una ciudad más sostenible".

Por último, el responsable de Medio Ambiente puertorrealeño, Pedro Romero, ha concluido animando "a participar en las reuniones de las Mesas y a trabajar para encontrar remedio a estas contradicciones y que hagamos una ciudad más cómoda para todos".